Experiencias al descubierto

Asuán ha sido durante mucho tiempo un santuario para los ávidos observadores de aves, sobre todo durante los meses de invierno.
Sin embargo, el encanto del Nilo al amanecer, cuando el mundo se despierta en un lienzo prístino, atrae no sólo a los observadores más dedicados, sino también a los que buscan una conexión más profunda con la naturaleza y un vistazo al rico tapiz de la antigua historia egipcia y las tradiciones nubias.

Los guías locales de Asuán son conocidos como los “Hombres Pájaro de Asuán”, y ni una sola criatura alada puede eludir su atenta mirada.
Llevan años guiando a observadores de aves y documentalistas por este país de las maravillas aviares, pero también acogen a aficionados a bordo de sus pequeñas lanchas rápidas.
Estas embarcaciones se deslizan sin esfuerzo por los laberínticos canales entre las islas, y los guías señalan con pericia la exuberante vegetación, un caleidoscopio de aves solitarias, las características abubillas y una hipnotizante variedad de garzas, como la garza imperial, la garza escuala, la garza estriada y la garza nocturna.
Martín pescador, garceta común, garcilla bueyera, archibebe y otras muchas especies aviares adornan este paraíso natural, haciendo de cada mañana en el Nilo una sinfonía de avifauna que resuena en el alma.

Asuán te invita a alejarte de lo ordinario y sumergirte en un mundo extraordinario donde cada momento está impregnado de historia y belleza.
Ya sea a través de la serena navegación de una feluca o de la vibrante vida de sus habitantes aviares, Asuán ofrece un retiro que toca el corazón y eleva el espíritu.